El ejército no hizo falta

Con un amplísimo despliegue de fuerzas de la Policía Local y nacional se procedió al desalojo de unos inquilinos de un edificio de la calle Lepanto. No hubo necesidad de llamar al Ejército para ejercer este acto. Un acto que daña la imagen de nuestra ciudad mas de lo que las autoridades locales, incluidas las fuerzas del Orden Público que intervinieron, creen.

Creo que esta clase de hechos deberían ser contemplado de otra manera y, si hay que proceder, hacerlo de forma sigilosa y no anunciándolo a bombo y platillo. No es esta la imagen que debe dar Benidorm

DESALOJADO UN EDIFICIO DE LA CALLE LEPANTO

Un dispositivo de agentes de seguridad formado por 20 policías locales y otros 20 policías nacionales, han desalojado hoy, a primera hora de la mañana, los apartamentos Lepanto, situados entre la calle Lepanto y la avenida de Filipinas, en el Rincón de Loix. En el interior de sus 28 inmuebles se encontraban un total de 45 personas, siete de ellos menores, que ocupaban los apartamentos de manera ilegal desde hace, aproximadamente, tres años. Pasadas las 10 de la mañana los efectivos policiales sellaban las principales entradas del edificio.

El desalojo no ha sido posible efectuarlo con anterioridad, según ha explicado el primer teniente de alcalde, Juan Ángel Ferrer, por depender el mismo de una orden judicial que llegaba, finalmente, en el día de ayer. Junto a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han participado en el desalojo, que se ha realizado de manera pacífica, efectivos Cruz Roja, Servicios Sociales, Servicios Técnicos, FCC y una trabajadora social.

Efectuado el desalojo, la trabajadora social ha confirmado que los menores residentes ilegalmente en los apartamentos Lepanto “estaban atendidos perfectamente por sus familias, por lo que no ha sido necesaria nuestra actuación, además de que son menores que no están en edad escolar”.

 

El primer teniente de alcalde, acompañado por el edil de Seguridad Ciudadana, Conrado Hernández, y por Juan Fuertes, Intendente jefe principal de la Policía Local, y Alfonso Cid, comisario de la Policía Nacional, ha destacado que la actuación sobre este edificio “venía de lejos, pues hablamos de tres años de problemática, de insalubridad, de problemas de estructura, de malas condiciones de vida y de problemas de inseguridad ciudadana para los hoteles y los turistas de la zona”.

Tanto el responsable de la Policía Local como el del Cuerpo Nacional de Policía han comentado que la ocupación de este edificio en el Rincón de Loix provocaba problemas colaterales como numerosos hurtos a pie de calle de joyas y dinero a turistas, especialmente a altas horas de la madrugada; ofrecimientos sexuales o una nueva modalidad de hurto que implicaba a mujeres de estos apartamentos dedicadas a acompañar a personas mayores hasta sus casas, dispuestas a ayudarles con la compra, para luego abordarlas en sus domicilios.

 

A pesar de ello, los responsables municipales, así como los representantes en Benidorm de las policías nacional y local, han puntualizado en repetidas ocasiones que “Benidorm en una ciudad segura”, donde no se conocen, ha dicho Alfonso Cid “casos tan habituales en otras ciudades de nuestras características como atracos o alunizajes”.

Por ello, Juan Ángel Ferrer ha lanzado un mensaje de “tranquilidad” a los operadores turísticos y a los empresarios de la zona de Levante tras haber cerrado con éxito este desalojo que, tal y como han indicado los responsables de la Policía Local y Nacional venía causando graves problemas como prostitución, hurtos o sanitarios.

Conrado Hernández ha recalcado que el desalojo no ha sido posible antes puesto que dependía “del ámbito judicial, y hemos tenido que esperar a actuar hasta que un juez así lo ha ordenado”. En este sentido ha admitido que la ocupación de estas viviendas por núcleos familiares con niños “da pie a un proceso judicial muy complejo”.

Al propietario del edificio se le ha instado desde el Ayuntamiento a que “proceda a realizar cualquier actuación técnica para que estos apartamentos no se vuelvan a alojar”. En tanto, el Consistorio -ha subrayado Hernández- se “mantendrá vigilante para que esto no ocurra de nuevo”.