POLITICA Y PROFESIÓN

Maesba

Lo que se viene publicando sobre el concejal Marcet, la relación entre su profesión y el desempeño de un cargo político, no es nada novedoso en nuestra ciudad y, sinceramente, no comprendo del todo que se este tratando como un asunto anormal o fuera del contexto que siempre ha tenido hechos iguales o muy parecidos.

Para mi, si hubiera que buscar algún culpable, me centraría en los funcionarios responsables de este tipo de hecho. Pienso que es el funcionario el que debe decir, cuando aparece una firma de un componente de la corporación municipal en cualquier proyecto, bien sea urbanístico, trafico, educación, etc., es quien debiera estar obligado a ponerlo en conocimiento inmediatamente a quien corresponda.

Creo que no hay que rasgarse las vestiduras por esto suceso ya que, como he dicho, podríamos hacer una novela de iguales casos que se dieron, se dan y se darán, en nuestro ayuntamiento. Creo que habría que saber diferenciar la implicación de un concejal haciendo su trabajo profesional en un proyecto público, relacionado con el ayuntamiento, como un simple trabajo. Otra cosa seria que ese mismo concejal fuese el promotor, el empresario, de una obra municipal. Ahí si que seria importante que, por ética por lo menos, abandonase el cargo que ostenta.